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por qué uber es el mejor ejemplo de libre mercado

Por Qué Uber Es El Mejor Ejemplo De Libre Mercado

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Uber sigue siendo el centro de atención. La popular aplicación de transporte económico, moderno y de calidad, ha tenido que enfrentarse a gobiernos y monopólicos gremios para poder ofrecer sus servicios en distintas ciudades y países del mundo. ¿Cuál es la razón por la cual gobiernos y gremios están en desacuerdo con la aplicación? Porque hoy día, Uber es el mejor ejemplo de libre mercado.


Uber, una popular aplicación para transporte en países del primer mundo, está siendo el centro de atención.

No solo por la forma en la que ha contribuido con los usuarios y el libre mercado, sino -también- por las protestas que se han dado en varios países a causa de su inesperada y exitosa aparición.

Pero, ¿Por qué ocurren estas protestas? ¿Será tal vez porque un sector favorecido por el Estado, está viendo a Uber como una gran amenaza para el monopolio que poseen los taxistas en el sector transporte de las ciudades? ¿O será quizás que los mismos gobiernos lo están viendo como una amenaza, por ser una exitosa expresión del libre mercado que podría jugar en su contra?

Desde hace mucho tiempo, en el mundo se ha querido erradicar el libre mercado, por ser una amenaza para la ideología que quiere dominar la forma de actuar, pensar, aprender de las personas. Esa ideología es, el socialismo; el cual -por muchos años- se ha encargado de decir o predicar que, “el capitalismo es malo”, que “los empresarios solo buscan explotar a las personas para su beneficio propio, trayendo consecuencias negativas para el mundo” y que “estos empresarios o burgueses -para muchos socialistas- buscaban convertir a sus empresas en malvados monopolios, para así poder dominar la oferta y demanda y poder colocar los precios a su antojo y avaricia”, etc.

Pero resulta que todo esto -a través de todos estos años- han sido simple falacias, ya que un monopolio -en libre mercado- sería casi difícil de mantener, y -si existiera- sería porque nadie podría competir contra él dada su eficiencia en los procesos productivos y precios bajos, con los cuales no sería sencillo competir.

Es por ello que los gobiernos crearon leyes antimonopolios, para “asegurar que todos puedan participar en el mercado”, lo cual ha sido una total mentira. El objetivo claro desde el inicio ha sido, el interés en controlar a los empresarios libres y -en lugar de ellos- darle poder a otros “empresarios” un tanto más amigos de la burocracia, los cuales -en libre mercado e igualdad de condiciones- nunca podrían competir y habrían quebrado.

Así pues, el Estado creó lo que se llama “monopolios coercitivos”; estos son los monopolios a los que ciertamente deberíamos temer. Estos “empresarios” favorecidos tienen de su lado la ley, para poder hacer las cosas a su antojo, controlar precios a su antojo y con la garantía que ninguna persona más eficiente o más innovadora pueda competir contra ellos.

Es aquí donde aparece Uber y el malvado “capitalismo”, la aplicación que surge del ingenio de un “perverso” empresario, quien -por beneficio propio- creó una mejor manera de moverse con mayor facilidad y calidad de servicio. Citando a un famoso economista: “El equilibrio natural se consigue en la sociedad porque cada individuo -al buscar su propio beneficio- beneficia a los demás”; y no estaba equivocado.

Al crear Uber, Travis Kalanick estaba buscando su beneficio personal, con lo cual benefició a sus usuarios y las miles de personas más que hoy tienen un trabajo gracias a Uber. Trabajo que les permite controlar su tiempo, cuándo trabajar, cuándo no y elegir cuánto quieren ganar, dependiendo del tiempo que le dediquen a mover personas.

Uber ha mejorado la forma de transportarse. Millones de personas en todo el mundo recibiendo un brillante servicio, a precios competitivos que no dependen de quién que está trabajando, sino de la oferta y demanda en todo momento. Es por ello que una élite está viendo a esta aplicación una “amenaza”, impidiendo su entrada en ciertos mercados.

Esta élite está formada por varios grupos sociales, los cuales no quieren competencia (dueños o conductores de taxi), otros que ganan dinero a través de la venta de cupos para la circulación de los taxis en la ciudad (algún político o grupo político) y los dueños de taxis que saben que -seguramente- muchos de sus vehículos no pueden competir, por su mal estado, lo cual involucraría el tener que invertir capital y pagarle mejor a los choferes de sus taxis.

Pero podría ser que también, los gobiernos apoyen a estos grupos o élites privilegiadas con los monopolios coercitivos, por el hecho de que Uber está demostrándole al mundo, la eficiencia del sistema de libre mercado; donde ese “perverso” empresario -a través de su beneficio propio- ha mejorado la calidad de vida de millones de personas, directa e indirectamente. Donde la acción individual de una persona, ha contribuido con el estilo y las aspiraciones de otros.

¿Será que los gobiernos no quieren que los ciudadanos se den cuenta de estos beneficios del libre mercado? ¿Será que no quieren que los individuos descubran el potencial detrás del sistema de libertades individuales y la libre competencia?

¿Pueden ver usted, lector, a través de este ejemplo de interés individual, cómo el mundo se beneficia y evoluciona gracias a los beneficios del capitalismo y su libre mercado?

Si usted lo puede ver, entonces hay esperanza.

¡Viva Uber!

 

Por José Jauregui

Jose Jauregui

Jose Jauregui

Venezolano, estudiante de Economía, creyente del liberalismo, las ideas de libertad y la Economía Austriaca. Soy responsable de mis acciones e ideas.

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