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Un Egoísmo Genuino Representa Un Profundo Logro Moral

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Una definición de «egoísmo» que incluye o permite la posibilidad de actuar con plena conciencia contra la propia felicidad a largo plazo es una contradicción en sí misma.

Un egoísmo genuino, es decir, una auténtica preocupación por descubrir qué es lo que favorece el interés personal, la aceptación de la responsabilidad de lograrlo, la negativa a traicionar jamás esa meta actuando por ciegos caprichos, humores, impulsos o sentimientos momentáneos, una lealtad sin compromisos con los juicios, convicciones y valores propios, representa un profundo logro moral.

Aquellos que aseguran que «todos somos egoístas» suelen presentar esta declaración como una expresión de cinismo y desprecio. Pero la verdad es que esa declaración le hace a la humanidad un cumplido que no merece.

La virtud del egoísmo –  Ayn Rand

No es un secreto que el adjetivo «egoísta» es popularmente utilizado para recriminar a otros el hecho de que se preocupen por sí mismos. Con esta acusación, se pretende buscar que las personas renuncien a sus intereses para preocuparse por los intereses de otros como supuesto «propósito moral noble y humanitario».

«Egoísmo» suele confundirse con avaricia, con lo cual al egoísta se le tilda de caprichoso, de macabro y es considerado como «capaz de vender su alma al diablo a cambio de lograr aquello de lo que está antojado». A esto es a lo que normalmente se refieren quienes argumentan que «todos somos egoístas», pero esta afirmación dista mucho de lo que racionalmenete significa ser un verdadero egoísta.

En una definición muy personal, egoísmo es sinónimo de integridad. Es el apego consciente a los propios valores y principios, a nunca renunciar a ellos en favor de los contrarios; a ocuparse del bienestar propio sin sentir pena ni culpa por los demás, ni a atentar contra la vida, la libertad ni la propiedad de otros. Ser egoísta es querer lo mejor para tí, transitando los caminos correctos del respeto, la honestidad y la justicia como medios para alcanzar aquello que es de tú interés y no apelando al abuso, la mentira y la estafa con tal de alcanzar aquello que consideras importante.

Ser egoísta es ser tú mismo; pensar y actuar por tí mismo con criterio propio, convicción y conciencia de que serás responsable por cada acción que emprendas, sin hipotecar la vida de otros para cubrir tus desaciertos ni apalancarte en su desgracia para alcanzar tus fines.

 

Por: José Miguel  |  Foto: AP Photographie

Jose Miguel

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Antes de conquistar el poder, debemos conquistar los medios, por eso fundé esta revista y no un movimiento estudiantil. Esta es mi cuenta de Twitter @JP7___

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