Es triste y da impotencia, el ver países con mucho potencial, caer en manos de mafias políticas, especialmente las de izquierda. Estos comunistas que gobiernan de la mano con el crimen organizado, se atornillan al poder, se apoderan de todos los recursos y utilizan todo el poder político para hacer miserables las vidas de los ciudadanos, como es el caso de Venezuela.
También es lamentable ver a países potencia, ser controlados por logias y mafias económicas que empujan agendas para destruir las libertades de las que se gozan en esos países, como fue el caso de EE.UU. en los últimos cuatro años.
La tecnología ha limitado nuestro poder de acción en el mundo real, pero ha catapultado la sensación de «estar haciendo algo» en el ámbito virtual.
En 𝕏 escribí:
El Internet es una excelente herramienta para la guerra cultural, porque permite que las ideas viajen a la velocidad de luz sin fronteras.
Pero el Internet es una terrible herramienta para tumbar tiranos, porque la gente ha llegado a creer que compartiendo un post “están…
— Jose Miguel (@jpgechele) January 11, 2025
Hay algunos casos en la historia moderna en la que ciudadanos han coordinado sus protestas y acciones a través de internet, pero estas han sido específicas y de ejecución casi instantánea, como el caso de Syria en 2011 o el Movimiento 15-M en España.
Mientras tanto, en países como Venezuela y Cuba, el tiempo juega a favor de las mafias en el poder y aniquila la moral de los ciudadanos que quieren cambio y una vida mejor, porque todo se reduce a una serie de campañas virtuales que solo generan dopamina masiva, haciendo creer a las personas que compartiendo información, imágenes -ahora con Inteligencia Artificial- y videos cortos «están actuando».
En Venezuela ha sido así desde 2008, pero el colmo del cinismo por parte de la «casta política veneca» (la falsa oposición) se ha profundizado desde 2017.
En 𝕏 escribí:
Lo único que puede salvar a Venezuela es un hecho sorpresa, un golpe que puede ser desde adentro o desde afuera que detone una situación inesperada e incontrolable para el chavismo y sus amigos de la oposición.
Así es como caen esos sistemas, no con “elecciones” confusas.
No…
— Jose Miguel (@jpgechele) July 27, 2024
Yo no creo que en Venezuela haya -hoy día- liderazgo para eso. Los políticos venezolanos están acostumbrados a ver la política como su fuente de ingresos, porque el trabajo honesto les da alergia.
Mucha gente se molesta con los que tenemos estas opiniones, porque «no tenemos fe, ni esperanza», pero es que esto -señoras y señores- no es un domingo en la iglesia, esto es el mundo real, esto es el comunismo.
En el mundo real, las cosas se hacen o no se hacen y si se hacen, se tienen que hacer rápido, porque el tiempo favorece al poder y perjudica a la gente que está pasando trabajo.
Por ejemplo:
Mi teoría es -y puedo estar bien equivocado- que estas cosas se cobran de una vez o no se cobran.
El 28J lo de las actas fue una genialidad, pero no había un plan para proteger y cobrar esos votos, así que el tiempo favorece -como siempre- al chavismo.
— Jose Miguel (@jpgechele) January 10, 2025
Al venezolano se le han repetido mil veces el mismo manual y muchos siguen cayendo. Aunque hay millones que han abierto los ojos y no se prestan para los circos virtuales de la casta política veneca, aún hay muchos que son instrumento ciego de su propia destrucción.
La casta política veneca no hace más que manipular a la gente, apalancándose en payasos como los influencers venezolanos, que solo buscan viralizar sus publicaciones para que sistema de monetización les pague el café de Starbucks, tal cual ha sido el caso reciente con la supuesta «toma de posesión de Edmundo González» y el colmo de la «carterita azul que perdió María Corina» luego de su mitin el 9 de enero de 2025.
Dije en 𝕏:
En 2017-2018, Nacho “La criatura” fue uno de los influencers que se pegó de la desgracia venezolana para hacer marketing propio y su canción “báilame”.
Hoy, todos estos influencers venecos se pegan de lo mismo para monetizar en X y poder comprarse su café en Starbucks.
— Jose Miguel (@jpgechele) January 10, 2025
Pero esta manipulación no solo pasa en Venezuela o cualquier otro país tercermundista o en manos de criminales. En EE.UU. también se vende humo virtual y la manipulación está a la orden del día.
La izquierda progresista estadounidense usa todo su poder económico, mediático y de entretenimiento, para manipular a la gente y hacerle creer cualquier cosa que su agenda quiera empujar, tal fue el caso de las elecciones de Noviembre 2024, donde se le hizo creer a millones que «las elecciones serían cerradas», que «Kamala Harris tenía la presidencia segura» y que «Trump es un Hitler».
Todo resultó ser mentira y la realidad -nuevamente- golpeó a la ficción virtual.
Si esto es así, entonces ¿Qué debemos hacer? Dije en 𝕏:
El Internet tiene que usarse como herramienta de coordinación y movilización, no como un mundo paralelo virtual en el que todos vivimos la fantasía de que "algo está pasando" y -mucho menos- "estamos haciendo algo".
Elon Musk es el ejemplo perfecto: Coordina por Internet y…
— Jose Miguel (@jpgechele) January 11, 2025
Su compra de Twitter -ahora 𝕏- no fue para vivir en un mundo imaginario en el ciberespacio, sino para coordinar y ejecutar. Prueba de esto es la forma en la que lo usa para promover sus empresas, principalmente Tesla y SpaceX.
Pero en el ámbito político, Elon Musk tuvo quizás la mayor influencia de todas en el hecho de que Trump terminara electo en EE.UU. de forma cómoda. Musk propuso, coordinó y movilizo a millones de estadounidenses a través de 𝕏 y ejecutó en el mundo real al estar presente en casi cualquier intervención de Trump, pero especialmente en su trabajo de vocero en Pensilvania, estado al que le dedicó especial atención y recursos financieros.
Repito, el internet es una excelente herramienta, pero si se confunde con un mundo virtual paralelo, los que viven en el mundo real siempre controlarán a los que viven en sus teléfonos.
Cierro con esto:
Un monton de imágenes, publicaciones, stories, hashtags, tendencias y gente difundiéndolas por internet, tienen muy poco efecto en el mundo real.
Mientras la gente segrega dopamina en sus teléfonos, los que movilizan y actúan en el mundo real son los que cosechan los frutos.
— Jose Miguel (@jpgechele) January 11, 2025
