El individuo -desde que apareció en este mundo- solo, desnudo, con la naturaleza que lo rodeaba, ha tenido un solo objetivo: buscar la satisfacción de sus necesidades.
Pero a diferencia de los animales que solo viven de instintos e impulsos sexuales, el hombre obtuvo algo adicional, ese poder de suprimir esos deseos con voluntad propia: la capacidad para razonar. En conclusión, el hombre nació libre.
El hombre se dio cuenta que gracias a esa libertad y por medio de las acciones dirigidas desde las ideas, podía buscar la mejor forma para satisfacer sus necesidades, a través de la evolución y el desarrollo. El individuo entendió que, si quería encontrar una mejor forma para lograr sus objetivos, debía cooperar con los demás individuos.
Se dio cuenta que necesitaba un sistema político social y económico que le permitiera desarrollar su capacidad creativa y empresarial al máximo para lograr tener esa satisfacción, que solo podía lograrla por medio de la libertad y armonía con los demás individuos, el respeto hacia ellos, sus propiedades y la libre asociación.
Es así como nace el sistema Capitalista, un sistema basado en la libertad y el respeto de las leyes; un sistema que no determina quién será rico y quién será pobre, donde el único que determinará esa decisión será el individuo mediante su esfuerzo, su capacidad de contener sus instintos animales y limitar las satisfacciones inmediatas. En este sistema nadie puede vivir a costa de los demás, sino que requiere de los demás para poder vivir.
En este sistema se requiere de la cooperación de todos los individuos, en la cual todos tiene un rol dentro del mismo. Las necesidades de los individuos son infinitas, es por esto que la mejor forma de mejorar las necesidades propias es: satisfaciendo las de los demás. Pero no todos poseen esa capacidad y es por eso que deben integrarse de uno u otro modo a ese proceso.
Algunos serán empleadores y otros empleados, pero su objetivo será el mismo: mejorar su calidad de vida. Esto solo lo podrán hacer a través de la libre asociación, donde empleado y empleador están dispuestos a llegar a las condiciones que mejor le favorezcan para lograr esos objetivos y desarrollar mejor sus capacidades. Son los individuos mediante sus decisiones quienes llevan el rumbo de un país o una nación, son las ideas individuales y la creatividad individual la que permite que se produzcan cosas impensables, es su egoísmo basado en la búsqueda personal de sus intereses, respetando siempre a los demás, lo que lo convierte en lo más importante dentro de una nación.
Pero será el mismo individuo quien se ponga los límites de hasta dónde quiere llegar y en qué nivel quiere vivir. Serán sus acciones y sus ideas las que determinen quién será dentro de una nación y será el responsable de sus éxitos y sus fracasos. Es esa naturaleza del individuo y su libertad, plasmada en el capitalismo, la que nos ha permitido llegar al nivel donde estamos hoy.
Es por esto que, cada vez que se busca la implementación de un sistema político, económico y social que deba -por la fuerza y coerción- decidir sobre el individuo, destruyendo así su relación social voluntaria y todo incentivo a mejorar sus condiciones de vida, que no le permita al individuo -por medio de sus méritos y esfuerzo- un nivel de vida mejor, este -tarde o temprano fracasará. Porque la naturaleza del individuo es ser libre. Es su voluntad ser responsable de su destino, ser dueño de sus éxitos y sus fracasos.
El individuo es un fin en sí mismo, por eso no estará dispuesto a permitir que se le esclavice para satisfacer a otros.
Por: José Jauregui