Este texto es una carta abierta, en respuesta al tweet publicado por el parlamentario Henry Ramos Allup.
Estimado parlamentario Henry Ramos Allup,
He leído su tweet donde manifiesta que: “Lo que necesitan nuestros barrios es comida, medicinas, seguridad, educación y servicios públicos”. En dicho tuit quedan plasmadas dos ideas que han llamado mi atención y son el motivo por el cual me aboco escribirle esta carta.
En primer lugar, es llamativo que usted se refiera a las necesidades solo de “nuestros barrios” cuando bien pudo hablar de “la población”, “los ciudadanos” o el más común “nuestro pueblo”. Siendo así bastante cónsono con la filosofía del “pobrismo” que ha dominado la política venezolana desde siempre. Esa filosofía de creer que los pobres son más importantes que los ricos es un cáncer que hemos tenido en el país y que deberíamos todos tratar de erradicar desde el mismo uso de nuestro vocabulario. Más aún usted que es una persona que presume (programa Vladimir a la 1, del 17 de octubre de 2016) y con razón de su buena utilización de nuestro idioma.
Esta filosofía pobrista de la política nacional queda plasmada en la siguiente frase que es histórica, mas por lo ridícula que por otra cosa: «Esa autopista que está haciendo el gobierno, no tiene ningún tipo de utilidad, simplemente la construye para transitar con los cadillacs de los ricos desde el puerto de La Guaira. Acaso díganme ¿Ustedes comen autopistas?». Esto lo dijo en 1952, durante un mitin en uno de “nuestros barrios” de Caracas, el líder opositor al gobierno de la época, Rafael Caldera, refiriéndose a la construcción de la Autopista Caracas – La Guaira. Este es el tipo de locuras que se llegan a decir por el afán de dividir a los ciudadanos con fines políticos de establecer nichos de votantes.
Por lo antes expuesto, antes de pasar a la segunda idea de mi interés, me permito en mi condición de ciudadano, sugerirle que cambie la expresión “nuestros barrios” por la expresión, los ciudadanos o cualquier otra que represente con mayor grado de aproximación a toda la población nacional. Que para eso es usted diputado de la Asamblea Nacional (y no solo de «nuestros barrios») y próximo candidato presidencial de su partido.
Tengo claro, que seguramente usted sabe más que yo de política y que hay ciertas palabras y discursos que proporcionan mayor rédito político que otros, pero supongo que esa es la diferencia entre un político populista y un estadista.
La segunda idea a la cual quiero hacer referencia, es al diagnóstico que usted plasma en el tweet, en cuanto a lo que necesitan los ciudadanos.
Lo que los ciudadanos necesitan no es más asistencialismo del Estado como usted propone, de eso han tenido desde que crearon el barrio. Me permito pues enumerar cosas que a mi juicio si necesita la población, circunscribiéndome solo a la parte material, ya que es el aspecto mencionado en su tweet:
- En primer lugar, necesitamos una moneda fuerte, la cual no se devalúe y que sea reconocida internacionalmente. Tenemos economistas brillantes en Venezuela, como Hugo Farías quien lleva años proponiendo un régimen de libertad monetaria. Puede ver un resumen de su propuesta en este video. Esto permitiría que el fruto del trabajo de los ciudadanos no pierda poder adquisitivo y puedan ahorrar. Con el ahorro, las personas pueden planificar y planear una estrategia de largo plazo para su proyecto de vida y así poder procurarse todos los bienes que usted dice que necesitan, educación, salud y lo que quieran. Desde la Asamblea Nacional (AN) su bancada podría proponer una iniciativa parlamentaria para establecer dicho régimen monetario.
- Otro aspecto que considero necesario, es multiplicar las fuentes de empleo. Bien podría usted, desde la AN, iniciar la derogación de leyes como la de Costos y Precios Justos, y/o la Ley del Trabajo, y eliminar todas las trabas para constituir empresas y contratar personal.
- Otra cosa necesaria, sería la inversión privada en todos los aspectos mencionados por usted. La inversion privada es lo que hace posible el fenomeno que representa el hecho de que en un barrio de díficil acceso se puedan ver los camiones de cervezas de empresas privadas despachando mercancia puntualmente y sin embargo no haya electricidad o agua potable. Imagine que grandes empresas inviertan en todos estos rubros, distribución de alimentos, medicinas, seguridad, transporte, instituciones educativas, instalaciones deportivas, centros culturales, centros recreativos. Las posibilidades de inversión en Venezuela, bien sea en los barrios, caseríos, poblados, ciudades grandes o pequeñas es inmensa. Bien pueden los legisladores como usted, presentar proyectos de leyes que otorguen incentivos fiscales para la inversión de dichos sectores.
Con estas tres cosas: moneda fuerte, inversión de capital privado y empleo, los ciudadanos pueden procurarse por si mismos y no mediante regalos del Estado, todas sus necesidades. Elevando así la dignidad y autoestima de las personas.
Por último, estimado diputado, me despido respetuosamente deseándole la mayor de las suertes y esperando que mi carta haya dejado claro la siguiente idea: Los individuos no necesitan dadivas del Estado, necesitan libertad para emprender sus proyectos de vida, como bien dice nuestro Himno Nacional: “el pobre en su choza libertad pidió”. Libertad; no comida, ni medicinas, ni seguridad, ni educación, ni servicios públicos. ¡LIBERTAD!
Por: Dakar Parada