Un estudio realizado por Pew Research y publicado en Prodavinci.com, cataloga a Venezuela como el país “más individualista del mundo”. ¿No ha sido Estados Unidos el país en cuyos ciudadanos está más arraigado el individualismo como parte de su espíritu constitutivo?
Sorpresivamente, según el mencionado estudio, el único país que supera a Estados Unidos en los índices de individualidad es Venezuela, donde el 62% de los encuestados están en desacuerdo con la idea de que el éxito está determinado por fuerzas externas al control del individuo. En pocas palabras, el venezolano considera que es el trabajo duro e individual el que permite a las personas alcanzar el éxito en la vida.
Los resultados lamentablemente distan mucho de la realidad, pues hoy día el venezolano ha aceptado la sumisión ante un sistema totalmente colectivista. Pero suponiendo que es cierto y mirando hacia el futuro, me dispongo a plantear cómo sería Venezuela si realmente fuese el país más individualista del mundo, tomando en cuenta algunos factores.
Tendríamos una constitución de verdad
Para empezar, el manual que determina en mayor medida la cultura de un país es su constitución. Si Venezuela fuese el país más individualista, su constitución hablaría de Derechos Individuales y no de Derechos Humanos. Estaría claramente expreso que los únicos derechos del individuo son su vida, su libertad y su propiedad limitando así las funciones del Estado estrictamente a la protección de estos. Venezuela sería un país de individuos libres.
Hablaríamos de libre mercado
Al reconocer que es el trabajo individual y productivo el único camino para el desarrollo personal, el venezolano no tendría temor por competir. Apreciaría más al comercio que a los favores gubernamentales, valoraría más el dinero ganado que el regalado, evitaría que el Estado regule su actividad comercial y empresarial y no tendríamos una economía rentista sino cien por ciento productiva.
Hablaríamos de educación libre
Valoraríamos más la educación sin financiamiento estatal, sin directrices impuestas por un ministerio. Cada persona escogería su educación basada en sus preferencias personales. Decidiría en dónde y de qué tipo sería esa educación.
Sentiría orgullo por lo alcanzado
En lugar de penalizar la ambición, la reconocería como un excelente motivador para el crecimiento individual. La certeza de que aquello que hemos logrado ha sido por esfuerzo propio, es la única fuente de orgullo y felicidad.
El gobierno sería limitado
En lugar de una manada de lobos oportunistas y vividores, tendríamos instituciones serías enfocadas en la protección de los derechos de cada uno de los venezolanos por igual. La igualdad sería ante la ley y no hacia la miseria.
Sería un país de primer mundo, desarrollado
Para terminar, de ser cierto que el venezolano lleva en la sangre el trabajo productivo como único medio para el éxito, no aceptaría que el Estado controle medios de producción. Defendería la propiedad privada, su propiedad, como única fuente para la generación de riqueza. Es así como los países desarrollados han alcanzado altos niveles en calidad de vida.
Cabe recordar que el individualismo es la filosofía propia del capitalismo. ¿Qué pasaría si Venezuela fuese el país más individualista del mundo? Sencillo, tendríamos un mejor país.
Por: José Miguel | Foto: Joel Bedford